La abogada tributaria Pablita Cabrera explicó los factores que llevaron al Banco Popular Dominicano a cancelar las cuentas bancarias de la influencer Mary Esther Rodríguez, conocida como “Mami Jordan“. La experta analizó las declaraciones públicas de la creadora de contenido sobre esta situación.
“Me piden que le traiga una carta de trabajo. No tengo dónde yo trabajo. Le digo que tengo mi propio negocio, que qué hago. Me cerraron todas mis cuentas”, declaró Mami Jordan en redes sociales, revelando que tenía aproximadamente 13 millones de pesos guardados en el banco.
Según Cabrera, el problema radica en el modelo de negocio de los influencers. “Los bancos tienen una responsabilidad con la ley de lavado de activos. El conoce a tu cliente no es más que verificar de dónde el cliente trae al banco el dinero que tiene guardado”, explicó la tributarista.
La experta señaló que cuando Mami Jordan aperturó su cuenta probablemente no declaró que manejaría montos tan elevados. “Si ella le hubiese dicho al banco ‘Yo pretendo ahorrar 13 millones’, no le estuvieran cerrando la cuenta“, indicó Cabrera.
El modelo de negocio de Mami Jordan incluye colaboraciones pagadas en Instagram, participación en eventos y presencia en establecimientos. “Las actividades de la Mami Jordan son gravadas con impuesto. Lo recomendable es que todos los influencers se registren en la Dirección General de Impuestos Internos“, advirtió la especialista.
Cabrera explicó que el banco devolvió el dinero mediante un cheque de administración, lo que significa que no hay investigación por lavado de activos en curso. Sin embargo, advirtió que la situación se hizo pública innecesariamente.
“Ella puede ser víctima de que todos los bancos le cierren la puerta porque casi nadie quiere agarrarse de personas que tienen algún tipo de cosas“, señaló la experta sobre las consecuencias de hacer público el caso.
La tributarista también advirtió sobre las consecuencias fiscales. “La Dirección General de Impuestos Internos le puede decir ‘dame lo mío’. El 27% le corresponde a la DGI de ese dinero que ella no declaró“, explicó sobre los impuestos pendientes.
Para resolver la situación, Cabrera recomendó que la influencer se registre formalmente y declare sus actividades. “Su problema no es que el banco sospeche algo malo de ella, es que ella no está declarando impuestos. Cuando ella declara impuestos, su problema se resuelve“, concluyó.
La experta hizo un llamado general a los creadores de contenido para que se organicen fiscalmente y eviten situaciones similares, enfatizando la importancia de cumplir con las obligaciones tributarias desde el inicio de sus actividades como influencers.