A cinco meses del suceso que marcó la caída de la discoteca Jet Set, la memoria del exjugador de Grandes Ligas, Octavio Dotel, sigue presente en el corazón de su familia, que continúa honrando su legado tanto en lo personal como en lo deportivo.
Su esposa, Massiel Javier de Dotel, compartió este lunes un mensaje de gratitud en sus redes sociales, recordando al hombre con quien formó un hogar y tuvo tres hijos.
En la publicación, expresó su sentir sobre la importancia de los años que compartió junto a él y el valor que representó en su vida.
“Y de nuevo es día 8, pero hoy elijo agradecer, por haber amado y sido amada, por haber compartido la vida con un hombre que honré y respeté”, escribió Massiel en un mensaje público en el que dejó reflejada la unión que los acompañó durante su matrimonio.
Con estas palabras, la viuda destacó lo significativo que fue haber vivido una etapa de amor, respeto y construcción familiar junto a quien fuera una figura admirada dentro y fuera del terreno de juego. Su testimonio refleja la forma en que ha decidido transformar el recuerdo en gratitud y fortaleza.
El pasado 8 de abril, el desplome del emblemático centro nocturno de la capital dominicana provocó una de las pérdidas humanas más relevantes en la historia reciente del país, dejando un saldo de 236 personas que ya no viven. Entre ellas se encontraba Octavio, quien había forjado una sólida carrera en el béisbol profesional y se convirtió en referente para varias generaciones de fanáticos del deporte.
Massiel señaló que la manera en la que elige rendir honor a su esposo se centra en mantener vivo el amor que compartieron, extender ayuda a quienes lo necesitan y mantener la búsqueda constante de la felicidad. De esta forma, asegura que su tributo se mantiene no solo en palabras, sino también en acciones que transmiten el espíritu solidario de su compañero.
Las expresiones de la viuda se suman a las múltiples muestras de apoyo que ha recibido desde el día del desplome, cuando la noticia impactó tanto al mundo del deporte como a la vida social y a la memoria colectiva de la nación. Amigos, familiares y admiradores han acompañado este proceso de recuerdo y resiliencia.
El legado de Octavio Dotel va más allá de sus logros deportivos, pues se enlaza ahora con la historia de fortaleza y continuidad de su familia. Cada día 8 se ha convertido en una fecha simbólica para Massiel, quien la utiliza como un espacio de homenaje personal y colectivo, reafirmando la memoria del hombre que, en sus propias palabras, “honró y respetó”.
