Un nuevo episodio controvertido salió a la luz este miércoles involucrando a un miembro de la Policía Nacional que previamente participó en el operativo contra Santiago Matías “Alofoke” en Boca Chica. El Sargento Mayor Rodríguez protagonizó un incidente con un ciudadano que se desplazaba en motocicleta por La Caleta, situación que se viralizó en plataformas digitales tras la difusión de material audiovisual del acontecimiento.
En las imágenes se observa al joven motociclista presentando toda su documentación al agente policial mientras cuestiona los motivos de la detención, alegando estar al día con todos sus requisitos legales. El ciudadano mantuvo una actitud cooperativa durante el procedimiento, mostrando sus documentos de identidad, licencia de conducir y papeles del vehículo. Sin embargo, el Sargento Mayor adoptó una postura confrontacional durante la intervención policial.
El uniformado reaccionó de manera severa hacia el ciudadano, manifestándole que no tomaba medidas más contundentes únicamente porque portaba un brazo enyesado. “Tu sabes porque no te he desmontado de ahí por la buena o por la mala, porque tienes un brazo averiado. Ni tu ni el me prohíben llevarme el motor”, declaró el agente con voz elevada, estableciendo claramente su posición de autoridad en la situación.
Durante el incidente estuvo presente la madre del joven, quien intervino para mediar y evitar que la confrontación escalara hacia consecuencias mayores. La mujer intentó calmar los ánimos y facilitar una resolución pacífica del conflicto entre su hijo y el representante de la ley. Su presencia fue fundamental para mantener cierta estabilidad en una situación que mostraba signos de tensión creciente.
El agente procedió a realizar intimidaciones contra el ciudadano, quien persistía en solicitar explicaciones sobre los motivos de la detención. “Quieres ver que te complique la cosa, quieres ver que ta la complique”, expresó el uniformado mientras utilizaba su radio para contactar otra unidad policial. Este comportamiento ha generado cuestionamientos sobre los protocolos de actuación policial y el trato hacia la ciudadanía en situaciones rutinarias.
El caso del Sargento Mayor Rodríguez cobra relevancia adicional debido a su participación previa en el operativo donde se utilizaron gases lacrimógenos contra Santiago Matías en Boca Chica. Este nuevo episodio ha reavivado debates sobre la conducta policial y la necesidad de supervisión en los procedimientos de control ciudadano, especialmente considerando el historial del agente involucrado en situaciones controversiales anteriores.