Una madre dominicana residente en el Bronx denunció que su hija adolescente fue objeto de una acción violenta por parte de un grupo conformado por nueve menores en las inmediaciones de su vivienda. La situación generó alarma familiar debido a las consecuencias físicas y emocionales que sufrió la joven.
De acuerdo con el testimonio, las autoridades comunicaron que la única medida judicial adoptada contra las presuntas responsables será una orden de alejamiento. No se contempla ninguna otra sanción debido a que se trata de menores de edad, lo que ha provocado inconformidad en la familia afectada.
En declaraciones difundidas en redes sociales, la madre explicó que su hija presentó traumas visibles en el rostro y en el cuerpo, lo que obligó a su traslado inmediato en una ambulancia para recibir atención médica. Relató que la menor, en un estado de constante temor, le manifestó: “Mami, van a venir y nos van a hacer daño”.
La progenitora también señaló que la adolescente corrió varias cuadras intentando escapar de la persecución, pero finalmente fue alcanzada por el grupo. El relato agrega que existe un video en el cual se observa cómo una de las implicadas entrega un objeto afilado a otra participante, incrementando la preocupación de la familia por la magnitud del hecho.
La madre indicó que la situación había sido advertida con anterioridad a la escuela Bronx Green, donde estudiaba su hija. Según recordó, una semana antes otra estudiante presuntamente la empujó por las escaleras. Por ello, desde inicios del ciclo escolar había solicitado un traslado de centro educativo, aunque las gestiones administrativas no fueron resueltas con rapidez.
Tras lo ocurrido, la mujer declaró sentirse desprotegida y criticó la respuesta tanto de las autoridades educativas como de las policiales. A su entender, no se adoptaron medidas preventivas oportunas pese a las advertencias emitidas previamente por la familia sobre posibles riesgos.
El caso quedó a cargo de un detective asignado, quien informó a los familiares que, debido a la condición de menores de las presuntas responsables, la medida inmediata será únicamente la aplicación de una orden de protección. Esta disposición busca limitar cualquier contacto entre las adolescentes involucradas y la víctima.
La madre, quien señaló que trabaja en varios empleos para sostener a sus hijos, sostuvo que su principal propósito es que se haga justicia y que el episodio sirva de advertencia para evitar que otras familias pasen por experiencias semejantes en la comunidad. La familia insistió en que se requiere un mayor respaldo institucional y un ejemplo judicial que contribuya a frenar este tipo de conductas entre adolescentes.
